Comeback

Me regalaron un rosario con sus cuentas lagrimosas,
reza a la Virgen, triste hombre,
reza al Señor, a quien estimes buen hombre,
Lancé las angustias de madera,
y empuñé la odiosa pluma,
al son de la música de primavera,
mi muñeca regalaba duchos poemas,
de amor, de tristeza, de melancolía,
¡oh lo siento!
me levanto con Wallace, ¿nostalgia?
mucha, en la oscuridad tiento,
mis ojos cegados, mis pasos firmes,
me guía la magia, los sueños vírgenes,
me hablan, me muestran, miro a otro lado,
a ti,
mis ojos cegados, mis pasos firmes,
a ti.

Poema del futuro

Condenarme con palabras, esclavos de ilusiones,
estrellarme con las estrellas del suelo,
sin atreverme a mirar las del cielo
desde terrazas y balcones.

Abandonarte pluma por mi corazón,
laissez faire,
sola vagando lindamente por el cañón,
laissez passer.

Notas de poesía, acordes de amor,
van abandonando poco a poco mis ojos el fulgor,
adormeciéndose en la morfina de tus labios,
aventurándose ellos en noche hasta despertar sabios.

La tristeza de España

He perdido toda esperanza con respecto al pueblo.
La política ya da igual, siempre permanecerá embarrada en los mismo defectos y problemas, pero el pueblo podía sobrevivir, dar un paso al frente, y lo ha dado en dirección al abismo, es triste y desgarrador, es opresivo observar cómo el pueblo andaluz muestra su despreocupación, su masoquismo. No es posible luchar por algo que no responde, en este país es sumamente barato ser corrupto, mientras en otros se destaca la homosexualidad de algunos, en éste es noticia diaria la corrupción y el insulto a los que madrugan cada día, y ese momento en que el pueblo podía levantarse, ha gritado ¡Viva las caenas!.
Resulta espeluznante que se dé esa situación, meses atrás el PP volvió a ser elegido para regir en la comunidad valenciana, esta noche el PSOE se ha encontrado como partido líder de la coalición que "levantará" la comunidad de los masoquistas idealistas.

Esta noche ya ha ocurrido más de una vez en este país. Los españoles ya nos arrodillamos plácidamente ante los musulmanes (mención especial merecen los violentos almohades y almorávides), ya enmudecimos ante la expulsión de los pródigos judíos (gracias a ellos financiamos el descubrimiento de América, por dar un único ejemplo entre muchísimos), ya besamos la mano de Fernando VII (al cual los mismísimos libros oficiales de Historia se refieren como el Rey felón) , ya coreamos a Francisco Franco (¿digo algo al respecto?), hemos tenido españoles ilustres como Juan Ramón Jiménez, Pablo Picasso, Francisco Ayala, Antonio Machado, todos ellos huyeron de España despavoridos, Mariano Larra, suicidado por la decadencia de su patria, Federico García Lorca, LO ASESINAMOS NOSOTROS MISMOS, no vale la pena seguir con la triste lista.

Es sencillo comprobarse, el pueblo español se ha caracterizado por sus constantes bandazos y errores, por su insólita irracionalidad, su momento del día más famoso es la siesta, el pueblo español que vale la pena se ve hundido por la otra cara de la realidad, por la política, por la demagogia, por el desinterés a nivel nacional, basta con analizar nuestra difunta historia, todo gran momento ha venido acompañado de una triste realidad subyaciente, todo triste momento ha tapado una parte del pueblo español que vale mostrar al exterior. Cabe señalar que España no es ahora el infierno, yo estoy orgulloso de ser español, pero también soy pesimista y desesperanzado, las cualidades y virtudes que alaban al pueblo español es su espíritu superviviente, su facilidad para el ambiente de fiesta, su alegría marítima, su amor por el sol, el enorme valor del sudor de su trabajo, su excepcional capacidad de callar y trabajar, por desgracia existen otros defectos que demonizan al colectivo español, no existe pueblo más callado y religioso, más idolatrador, más conformista, más cacique en definitiva, si acaso los sudamericanos, aquellas tierras que colonizamos y que son la triste herencia que legamos a la América hispana.

Sólo queda llorar por España como se ha hecho innumerables veces, sólo queda maldecir el contexto que nos caracteriza, sólo que ser español y orgulloso por ello.

Requiescat in pace Andalucía

Tenía Andalucía ante sí la más emocionante oportunidad de dar un paso adelante, de demostrar que la demagogia tenía un límite, la corrupción tenía restricciones, la sensatez y el sentido común prevalecía.

Ha respondido favoreciendo un nuevo Gobierno socialista.

Estos cuatro años dictarán sentencia, por desgracia, convertirán a Andalucía en bastión de oposición a cualquier movimiento del Gobierno central, Andalucía sufrirá una sequía, se empobrecerá, los parados se multiplicarán, las reformas a nivel nacional tendrán como respuesta contrarreformas a nivel andaluz, Andalucía estaba al borde del abismo, y la respuesta andaluza ha sido saltar al vacío, sin siquiera saber qué hay abajo.
Los masoquistas vendrán en masa, de la mano de corruptos, demagogos, idealistas, apolíticos, ironías del pueblo, etc.

Esquirlas de amor

Me enamoré del amor, mas apareció tu appeal.
Antaño esclavo, liberto de tu belleza,
curvas y colores eslavos, curvas y caderas con presteza,
envainamos el frío cuchillo de la realidad,
en una noche de sueños y caricias,
vagando por tus sinuosas curvas sin final,
hollé la cumbre de tu flor subrepticia,
vendí mi alma, mi corazón zafio,
por el sabor de tus labios.
Gotas de agua rodeaban tu iris,
visitas a la ducha,
concierto de gemidos,
paseos de lenguas, ríos de sexo,
minutos mentirosos de sueño interrumpidos
por el deseo obseso.
                                Alarma.

Horas atrás rompimos camisetas,
rompimos el alambre, mis ojos juraron,
rompimos mi alma, mi corazón juró.
Las pocas esquirlas de amor quedaron
en los más hondo de mi corazón perjuro.

Su sonrisa

Mi historia habla de una cosa bonita
que sonreía para placer mío.
Mi historia habla de una sonrisita
que eran semillas en estío.
Estrella lejana
que no deja de brillar con fuerza,
eterna sonrisa insana
por la que mi alma se esfuerza.

4 reyes

El precio de una noche de 4 reyes,
cobróse la amistad, el tesoro que me protege,
desnudado ante la vergüenza, la tristeza de quien perece.
Una visita al cementerio,
sería acertado, regio,
unos versos, 
unas lágrimas,
unos besos,
todo al aire,
a la suave brisa, al viento recio.
Mientras mi ropa ondula, mi corazón llora,
mi alma de cristal, en la sala de espera,
clama por mi tesoro, mi amistad incolora.
Doloroso trance, avanzo, dejo tinta,
trato de recordar a mi querida extinta,
trato de olvidar a mi querida extinta.
Protegido al calor de la sonrisa mestiza,
¡a la lucha!, ¡a la libertad William!
En el cementerio que somos tú y yo, 
se salvó una pequeña flor,
tú sigues mirando nuestra lápida,
mientras intento salvar los frágiles pétalos
que son esperanzas cálidas,
realismo vándalo,
esperanzas bañadas por el sol de la locura.
Tinta de quien vergüenza y tristeza exuda.